Sale a la luz nueva información sobre los autores de las masacres en Texas y Ohio, ocurridas en menos de 24 horas este fin de semana.
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SUSCRIBITESale a la luz nueva información sobre los autores de las masacres en Texas y Ohio, ocurridas en menos de 24 horas este fin de semana.
La de Texas se investiga como un crimen de odio y en la matanza de Ohio, las autoridades aún tratan de determinar cuál fue el motivo.
¿Qué podría haber motivado a Connor Bett a disparar indiscriminadamente y matar a nueve personas en Dayton, Ohio?
“Él era alguien que disfrutaba atemorizar a la gente, a mí me amenazó y me hizo sentir mucho miedo”, describió una chica al joven pistolero de 24 años, abatido tras la matanza.
No dejó rastros de sus intenciones en las redes sociales, pero quienes lo conocieron lo han recordado como una persona inestable y agresiva, que fue suspendido en el último año de su escuela secundaria a causa de una lista de mujeres a las que decía que quería matar, como recuerda esa joven que era una de ellas.
“Yo estaba en esa lista. Lo que sabía es que eran mujeres sobre las que tenía algún interés romántico o que lo habían rechazado”.
En las últimas horas se le ha relacionado con una cuenta de Twitter que ya ha sido cerrada, donde al parecer se definía a sí mismo como un izquierdista que quería el socialismo y criticaba al presidente Trump y sus intenciones de construir un muro en la frontera con México.
Bett no tenía antecedentes penales y sólo un par de multas de tráfico en su récord.
Mató a su hermana y al novio de esta, que fueron hallados dentro de un auto antes de salir a disparar a mansalva con un arma calibre 223 que compró legalmente en internet, antes de ser abatido por los oficiales en menos de un minuto.
En la otra cara de la moneda está Patrick Crucious, quien horas antes abrió fuego en un Walmart de El Paso y mató a 22 personas, así como dejó 27 heridas.
Habría actuado en calidad de lobo solitario movido por ideas racistas y supremacistas.
Según las autoridades, confesó tras su detención que quería matar a tantos mexicanos como fuera posible.
Había unas tres mil personas en el lugar en medio de la movida época de compras de inicio de curso escolar.
Crucious, de 21 años, manejó nueve horas hasta El Paso desde el suburbio de Allen donde vivía, para cometer la matanza.
A raíz de la polémica sobre el uso y venta de armas generada por las últimas masacres, el gobernador de Texas pidió hoy a la legislatura estatal nuevas regulaciones.
“Pido a los legisladores que pasen una ley para que haya más verificación sobre los vendedores y compradores de armas”, dijo el gobernador Mike Dewine, quien reconoció que es preciso tomar más medidas mientras se encuentra un balance sobre el derecho a portarlas.
FUENTE: Yossie Galindo / América Tevé
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