La congresista federal María Elvira Salazar presentó un proyecto de ley bicameral junto con el senador Marco Rubio para reducir los precios de las viviendas a compradores locales y garantizar que el dinero ilícito no entre en el mercado inmobiliario de Miami.
Además de un impuesto del 35% a extranjeros que compran inmuebles, el proyecto de ley también se enfoca en inversiones de viviendas asequibles y de bajos ingresos.
Esto, para hacer frente a la crisis de viviendas que actualmente enfrenta el condado Miami-Dade, donde adquirir un inmueble se ha convertido en toda una odisea.
Para Jorge Rey, especialista en bienes raíces, esta propuesta tiene más beneficios, que inconvenientes.
Recientemente, una ley promulgada en la Florida restringió la compra de viviendas a extranjeros de Rusia, Cuba, Venezuela, Norcorea, China, Irán y Siria, quienes no podrán adquirir inmuebles en áreas próximas a infraestructuras críticas, como aeropuertos, puertos o centrales eléctricas.
A pesar de los beneficios que pudiera generar el proyecto de ley para los ciudadanos del sur de la Florida, también se plantean las consecuencias a futuro de iniciar una legislación dirigida a controlar las compras o ventas de los dueños de inmuebles.