Desconsolados y rotos de dolor hablaron los padres de algunos de los jóvenes fallecidos en un fatal accidente de tráfico en el 2018, después de que un conductor ebrio, Lionel Orrego, de 42 años, los atropellara con su camioneta en la carretera Interestatal I-95.
Además de los cargos de homicidio, enfrentaba acusaciones de DUI con lesiones corporales graves y daños a la propiedad.
Este viernes, un juez lo sentenció a diez años de cárcel, pero que podrían reducirse a cuatro si tiene buen comportamiento.
A la sentencia de prisión le seguirán cinco años de libertad condicional y suspensión de la licencia de conducir de por vida.
Los familiares de las víctimas, tras el juicio, expresaron su tristeza y desilusion.
Manifestaron que si bien hoy Orrego se declaró culpable, durante las otras vistas siempre mantuvo su inocencia.
Además, señalaron que, aunque la sentencia hubiera sido mayor, no hay nada en el mundo que pueda devolverles la alegría.
El abogado de Lionel Orrego también habló al respecto.
El trágico hecho sucedió en el año 2018, cuando un grupo de buenos samaritanos se detuvo para ayudar a motociclistas involucrados en otro accidente.
Fue entonces cuando Orrego golpeó al grupo de personas al costado de la carretera.
Fallecieron cuatro jóvenes y otras siete personas resultaron heridas.
Hoy, estas familias llenas de dolor solo esperan que nadie pase por algo así y piden a todos, que por favor, si beben, no conduzcan.