Un grupo de mujeres progresistas en Estados Unidos ha propuesto una "huelga de sexo" como respuesta a la reciente victoria de Donald Trump en las elecciones del pasado 5 de noviembre.
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SUSCRIBITESe trata de una versión estadounidense de un movimiento surcoreano llamado 4B, por el cual las mujeres no deben tener relaciones con hombres.
Un grupo de mujeres progresistas en Estados Unidos ha propuesto una "huelga de sexo" como respuesta a la reciente victoria de Donald Trump en las elecciones del pasado 5 de noviembre.
Inspirado en el movimiento surcoreano "4B," este llamado busca que las mujeres eviten relaciones y compromisos con los hombres, aludiendo a una protesta contra lo que consideran una victoria para el machismo y el racismo.
Desde la victoria de Trump, las redes sociales han sido testigos de múltiples llamados de mujeres que invocan el espíritu de "Lisístrata," la comedia griega en la que las mujeres recurren a una huelga de sexo para promover la paz.
Voces de influencers y usuarias progresistas han justificado esta medida como una forma de manifestarse contra un presidente con antecedentes de acusaciones de misoginia y racismo.
Esta reacción en redes es vista como una manifestación de rechazo no solo hacia el presidente, sino también hacia sus más de 70 millones de votantes, a quienes critican por apoyar una agenda considerada "anti-woke" por estos sectores. El nombre "4B" representa los pilares de este movimiento: nada de sexo, citas, hijos ni matrimonio con hombres.
El surgimiento de estas declaraciones ha sido interpretado por algunos analistas como un reflejo de la creciente polarización y radicalización de la sociedad. Algunas mujeres han expresado abiertamente que su reacción al enterarse de que un conciudadano votó a favor de Trump será contundente y, en ciertos casos, "violenta".
La respuesta de sectores conservadores y centristas no se ha hecho esperar, destacando que estos llamados solo intensifican la división ideológica en la sociedad. Según estudios del Carnegie Endowment, esta polarización se está consolidando tanto a nivel institucional como social, evidenciando la brecha cada vez mayor entre los distintos sectores del país.
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