Andy Prada llegó en febrero pasado a Miami, tras cumplir un año en prisión por sumarse a aquel movimiento Clandestinos en la isla, que manchó con pintura roja el 13 de enero de 2020 una valla con la imagen del fallecido dictador Fidel Castro y un busto de José Martí en el reparto Versalles, en Santiago de Cuba.
Se trató de una acción que, reitera, nadie le pagó desde el exilio para hacerla.
Andy habla en exclusiva con América Noticias en sus primeras declaraciones a un medio de prensa desde que entrara a Estados Unidos.
El régimen lo liberó en enero de 2021 de la prisión de Mar Verde en Santiago de Cuba. Por casi dos meses estuvo preso en Villa Marista.
Cuenta que lo arrestaron pocas horas después de que a las dos de la mañana del 13 de enero de 2020, manchara con pintura roja la imagen de Castro y el busto de Martí.
Este ex preso político que afirma se motivó a hacer lo mismo en Santiago de Cuba el ver en redes sociales las acciones de los Clandestinos en La Habana, cuenta que tuvo que salir de la isla tras su liberación, por el acoso del régimen.
Primero viajó a Rusia. De ahí pasó un tiempo en Dubai y después fue a Colombia. Desde allí hizo la travesía centroamericana hasta la frontera estadounidense, donde hoy está en proceso de asilo político.
Prada afirma que sufrió muchas torturas psicológicas en prisión y que incluso le propusieron grabarle un video para que hablara de sus supuestas conexiones con exiliados cubanos, pero que él siempre se negó porque lo hizo por su convicción.
Él afirma que cuando hizo su acción en Santiago de Cuba, no conocía a los miembros de Clandestinos y que vino a conocer a Panter Rodríguez en prisión, para quien hoy pide el apoyo del exilio cubano, para que no se olviden él, condenado a 15 de años de cárcel en la isla.
FUENTE: Rolando Napoles | americateve.com