Con un panorama igual al de los últimos tiempos, visitantes llegan al lugar, mientras manifestantes en la puerta claman por su cierre inmediato.
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SUSCRIBITELas puertas del Miami Seaquarium abrieron un día más al público. En el lugar se experimenta una aparente calma
Con un panorama igual al de los últimos tiempos, visitantes llegan al lugar, mientras manifestantes en la puerta claman por su cierre inmediato.
El tribunal donde fue presentada por parte del condado Miami-Dade la demanda de desalojo el pasado 25 de junio todavía no ha dado a conocer su decisión.
Esta demanda llegó después de que el condado rescindiera el contrato de alquiler del recinto con la compañía del Seaquarium y solicitara su entrega el 21 de abril.
El condado mantiene firme la postura de que el parque acuático no puede seguir operativo en el mismo recinto, al considerar, tras inspecciones realizadas, que tiene problemas de cuidado animal y mantenimiento.
“Creemos que las razones para terminar nuestro contrato siguen presentes”, dijo Daniella Levine Cava, alcaldesa condado Miami-Dade.
Dolphin Company, propietaria del Miami Seaquarium desde 2022, ha rechazado las acusaciones realizadas por el condado de Miami-Dade, y en su más reciente comunicado, destacó:
“Claramente, los intereses financieros y políticos en la reurbanización de este valioso sitio costero de 38 acres para emprendimientos más lucrativos están influyendo en esta demanda, en lugar de una preocupación genuina por los animales o el respeto por las autoridades federales que otorgaron a MS Leisure sus licencias necesarias para operar”.
Por su parte, en un comunicado, el condado indicó al respecto:
“En caso de que se confirme nuestra queja y The Dolphin Company deba desalojar las instalaciones, el condado llevará a cabo un proceso para determinar el futuro del Miami Seaquarium, que incluirá la oportunidad de recibir comentarios del público. Es importante tener en cuenta que el uso del sitio está muy restringido”.
La atracción acuática con cerca de siete décadas enfrenta en este momento su futuro más incierto y sigue siendo hoy tema de debate en el condado Miami-Dade, con residentes en contra y a favor de su continuidad.
“Muy triste que vaya a cerrar, porque hacen una labor educativa para la familia”, aseguraba Jorge Galindo.
“Voluntarios como yo hemos venido durante años por los animales y la explotación que aquí han sufrido. Venimos aquí a ser la voz de los animales que están sufriendo para que, para entretener, estamos en 2024 esto no debería entretener a nadie”, declaraba Rick, residente.
La compañía propietaria del Seaquarium está dispuesta a batallar legamente por su permanencia, aunque desde del condado esperan algo distinto.
“Esperamos que Dolphin Company tome las medidas necesarias para desalojar las instalaciones y garantizar que la transición se realice de manera segura para los animales”, dijo la alcaldesa.
Ninguna de las partes implicadas parece estar dispuesta a ceder, por tanto, ahora se espera que en los próximos días, un juez determine cuál será la suerte del Miami Seaquarium.
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