La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (USBP) confirmó el arresto de Daniel Delgado Lorenzo, un ciudadano cubano de 55 años, residente indocumentado en los Cayos de Florida, que acumula más de 30 detenciones y un largo historial delictivo. Las autoridades informaron que el detenido se encuentra bajo custodia y será deportado a su país de origen.
Según datos oficiales, los antecedentes penales de Delgado Lorenzo comenzaron en 1996 e incluyen agresión agravada con arma, abuso de ancianos, robo con fuerza, posesión de drogas, resistencia al arresto y peleas, entre otros delitos. La Oficina del Sheriff del condado de Monroe reporta que ha sido arrestado 35 veces desde 2002 hasta mayo de 2025, con cargos adicionales como allanamiento de propiedad privada, exposición indecente, violencia doméstica, maltrato animal, fuga tras accidente vehicular, conducción con licencia suspendida y violaciones de libertad condicional.
El arresto de Delgado Lorenzo se produjo el pasado 5 de junio, según informó Jeffrey Dinise, jefe de la Patrulla Fronteriza en el sector Miami, quien lo calificó como el “criminal de la semana” en una publicación en su cuenta de X (antes Twitter).
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Este caso se suma a otros recientes que reflejan la intensificación de los operativos migratorios en Estados Unidos. La semana pasada, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) reportó la detención en Los Ángeles de Elkis Lázaro Hermida, cubano condenado por actos lascivos contra una menor. Asimismo, en una redada en Miami, fue arrestado Roberto Mosquera Del Peral, de 58 años, con condenas por homicidio y agresiones agravadas a agentes de policía.
Por su parte, la Patrulla Fronteriza detuvo recientemente al cubano Ángel Rodríguez, señalado como miembro de la pandilla Latin Kings, acusado de robo de identidad, hurto mayor, posesión de arma de fuego por un delincuente y falsificación de documentos.
Estas acciones se producen en un contexto de creciente tensión en torno a la inmigración en el país. La administración del presidente Donald Trump ha intensificado los operativos para identificar y deportar a inmigrantes con antecedentes criminales y estatus irregular. Mientras parte de la población respalda estas medidas, organizaciones de derechos humanos y algunos legisladores subrayan la necesidad de garantizar procesos justos y el respeto a los derechos civiles, incluso en casos de personas con condenas previas.
Además, ICE ha incrementado las detenciones de indocumentados al finalizar sus audiencias en tribunales de inmigración, en un esfuerzo por aplicar procedimientos de deportación expedita a quienes ingresaron al país en los últimos dos años. Desde mayo, cientos de migrantes han sido arrestados al salir de sus audiencias rutinarias en cortes de Florida y Texas, incluidos ciudadanos cubanos.
Actualmente, se estima que 42,084 cubanos cuentan con órdenes de deportación en Estados Unidos. Sin embargo, las deportaciones se ven obstaculizadas por la negativa del régimen cubano a recibirlos, lo que ha llevado al gobierno estadounidense a considerar la opción de enviarlos a terceros países, mientras continúan suspendidas las negociaciones migratorias entre Washington y La Habana.