Rosa Iriarte Alcalá, de 52 años, fue arrestada y acusada de abuso infantil tras presuntamente golpear a un niño de tres años mientras le cambiaba el pañal en una guardería de Hialeah, Florida. La mujer, quien se desempeñaba como directora del centro EZ Daycare and Learning Center, fue despedida inmediatamente después del incidente.
De acuerdo con el informe policial, el hecho ocurrió el pasado viernes y fue captado por las cámaras de seguridad del establecimiento ubicado en 1325 W. 30th St.. Las imágenes mostraban el momento en que Alcalá golpeaba al menor, dejándole una marca visible de una mano en el muslo izquierdo.
La denuncia y las pruebas en video
El caso salió a la luz cuando la abuela del niño notó la marca al recogerlo y alertó a la madre. La familia informó lo ocurrido a la propietaria de la guardería, Natasha Johnson, quien revisó las grabaciones internas. Tras confirmar la agresión, despidió de inmediato a la exdirectora y notificó a las autoridades.
Fotografías presentadas como evidencia mostraron enrojecimiento y contornos de dedos en la piel del menor, compatibles con un golpe dado por un adulto. El Departamento de Policía de Hialeah procedió a detener a Rosa Iriarte Alcalá, quien más tarde compareció ante el tribunal de fianzas del condado de Miami-Dade.
Proceso judicial y sanciones
La jueza Mindy Glazer fijó una fianza de $5,000 dólares y le ordenó mantenerse alejada del niño y de la guardería mientras continúa la investigación. Alcalá, identificada como ciudadana venezolana, enfrenta cargos por abuso infantil, un delito menor de primer grado que puede implicar hasta un año de cárcel o una multa de $1,000 dólares.
En casos más graves, la agresión puede clasificarse como delito mayor de segundo o tercer grado, con sanciones de entre 5 y 15 años de prisión, especialmente si se utiliza un arma o se causa daño físico severo.
La investigación permanece abierta bajo supervisión de las autoridades locales y del Departamento de Niños y Familias de Florida (DCF), mientras la guardería colabora con la familia de la víctima para garantizar su bienestar y seguridad.