El gobierno federal habría comenzado a notificar a algunos empleados la posibilidad de que puedan quedar sin salario a partir del fin de semana, por un posible cierre, luego de que la Cámara de Representantes rechazara un plan bipartidista del Senado para otorgar financiamiento a la administración Biden.
Los republicanos en la cámara baja rechazan el presupuesto de 6,8 billones de dólares para 2024, que exige docenas de nuevas iniciativas políticas e impuestos más altos para las corporaciones y las personas adineradas.
El periodista y experto en temas económicos Leonardo Morales explica qué empleados podrían resultar afectados.
“Especialmente, los trabajadores de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA), quienes, por contrato, no tendrían la obligación de ir al trabajo, si no reciben su salario”.
La Casa Blanca ha tratado de hacer hincapié en la gran variedad de programas y servicios que se verían afectados, mientras responsabiliza a los republicanos de la Cámara de Representantes por la paralización.
Pero los expertos no creen que se puedan ver perjudicados en una primera etapa, “por el momento no, porque el gobierno tiene esos pagos garantizados por algunos meses”.
Alejandro Aguirre, experto económico, destaca que el gobierno tiene mecanismos para mantener la operatividad a pesar del posible cierre.
“El gobierno tiene una ley que utiliza para determinar qué servicio se va a afectar ante una posible falta de financiamiento”.
Desde 1976, el financiamiento del gobierno de Estados Unidos ha sido interrumpido en 21 ocasiones, en esta oportunidad, los expertos dudan que, de producirse el temido cierre, se prolongue por mucho tiempo.