Y aunque los organizadores aseguran que es un evento puramente cultural, no pudieron abstenerse de victimizarse con su habitual toque político, al achacar a la presión y el acoso que supuestamente recibieron quienes remaron en reversa.
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SUSCRIBITEY aunque los organizadores aseguran que es un evento puramente cultural, no pudieron abstenerse de victimizarse con su habitual toque político, al achacar a la presión y el acoso que supuestamente recibieron quienes remaron en reversa.
El músico Jorge Luis Robaina, director artístico del festival, ofreció el miércoles una conferencia de prensa en el Hotel Nacional, donde llamó la atención la ausencia de Lis Cuesta, La Machi, la esposa del dictador Miguel Díaz Canel, quien había sido hasta ahora la cara visible del evento.
La ausencia de La Machi puede considerarse un intento del régimen de desmarcarse del fracaso inminente del festival, del que se bajaron cantantes como los españoles Alex Ubago, Andy y Lucas, así como el mexicano Kalimba y la italiana Denise Faro.
Y es que el bombardeo de memes en las redes sociales ha sido mucho, con toda una antología de burlas a la “primera dama” y a los pocos artistas que se mantienen aferrados a la dictadura, como Raúl Torres y el dúo Buena Fe, que cada vez más obra de mala fe.
Robaina, líder del grupo Karamba, llegó incluso a afirmar que el binomio de Andy y Lucas se bajaron de San Remo porque tienen prevista una gira por Estados Unidos e ir a La Habana atentaría contra sus intereses. Ah, Karamba, como si Cuba fuera el ombligo del mundo.
El organizador aseguró que “hay un montón de artistas que quieren venir”, aunque no mencionó ni un solo nombre de ese “montón”.
A lo mejor Manolín, el Médico de la Salsa, se apunta para participar, ahora que volvió a radicarse en Cuba, después de pasar años sin penas, ni glorias entre Miami y España.
Dada su larga estancia allende los mares, ¿contaría Manolín como “artista extranjero”? ¿Al menos contaría como “artista”?
Por cierto, ¿no había anunciado en junio pasado que se retiraba para siempre de la música?
Los hombres de verdad deberían cumplir su palabra, porque eso de entusiasmarnos con la noticia de que no escucharemos nunca más nada de él y ahora bajarse con que vuelve con nuevos ataques sónicos disfrazados de producciones discográficas es fula.
Lo peor para la dictadura no es que españoles, mexicanos e italianos hayan decidido remar de vuelta antes de desembarcar.
Tampoco que esos mismos, con miles de seguidores en las redes sociales, hayan denunciado públicamente la represión de un régimen que encarcela niños por pensar por sí mismos.
Lo que más debería preocuparle al Canelo y su inseparable Machi es que haya artistas nacionales, residentes en la isla, que también decidieron darle “bajanda a la culturanda”, como diría Ramón Fernández Larrea, en una suerte orwelliana de Rebelión en la Granja.
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