El poderoso huracán Melissa continúa su paso destructivo por el Caribe tras azotar Jamaica con vientos catastróficos y lluvias torrenciales. Aunque el centro del sistema ya se alejó de la isla, la amenaza persiste con inundaciones, marejadas y ráfagas violentas que siguen afectando amplias zonas del país.
Embed - El huracán Melissa impacta en Jamaica: alerta máxima en la isla caribeña
Una tormenta histórica y mortal
El fenómeno, que alcanzó la categoría 5 en su punto máximo y ahora se mantiene como huracán categoría 4, es considerado uno de los más potentes que ha impactado Jamaica en su historia reciente.
Hasta el momento, al menos siete personas han perdido la vida y se reportan graves daños estructurales en viviendas, carreteras y el sistema eléctrico nacional.
Autoridades locales han expresado preocupación porque muchos residentes ignoraron las órdenes de evacuación, pese a que el país cuenta con más de 880 refugios habilitados. “Esta es una situación extremadamente peligrosa y que pone en riesgo la vida”, alertó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) en su último parte de las 4:00 p.m.
Lluvias extremas e inundaciones costeras
Los pronósticos advierten que las precipitaciones podrían superar un metro en algunas regiones montañosas, mientras que el nivel del mar podría elevarse hasta 4 metros en la costa sur de Jamaica debido a las marejadas ciclónicas.
Las autoridades meteorológicas insisten en que, aunque el ojo del huracán ya abandonó la isla, los efectos del fenómeno continuarán durante las próximas horas.
El huracán se dirige hacia Cuba
Tras su paso devastador por Jamaica, el huracán Melissa se desplaza lentamente hacia el noroeste del Caribe, con Cuba como su próximo objetivo.
El Instituto de Meteorología de Cuba (INSMET) mantiene alertas ciclónicas en las provincias orientales, incluyendo Granma, Santiago de Cuba, Holguín y Guantánamo, donde ya comienzan a sentirse fuertes ráfagas y lluvias persistentes.
Recomendaciones del NHC para la población
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) reiteró su llamado a no abandonar los refugios hasta que las autoridades locales lo indiquen.
“Para protegerse del viento, coloque tantas paredes como sea posible entre usted y el exterior. Refúgiese en una habitación interior sin ventanas, idealmente donde no haya riesgo de caída de árboles. Cubrirse con un colchón y usar un casco puede salvarle la vida”, señaló el organismo.
Melissa sigue siendo una amenaza
Aunque ha bajado ligeramente de intensidad, Melissa sigue siendo un huracán extremadamente peligroso, con vientos sostenidos de más de 240 km/h (150 mph). Los expertos advierten que su impacto sobre el oriente cubano podría ser severo, con alto riesgo de inundaciones, cortes eléctricos y daños estructurales.