Detienen en Aeropuerto de Miami al ex esposo de colombiana de Miami desaparecida en Madrid

Al día siguiente, otros dos amigos recibieron mensajes de Ana María, uno en inglés y otro en español.

Sin embargo, ambos rápidamente se dieron cuenta de que los textos no fueron escritos por ella, debido a la forma de expresión y su contenido.

En los mensajes, Ana María explicaba que había conocido inesperadamente a un hombre y se iba a pasar el fin de semana a su casa en el campo a las afueras de Madrid.

“Ayer, después de la terapia necesitaba un paseo y él se me acercó en la calle. Conexión increíble, como nunca antes”.

“La forma en que se expresó en el mensaje fue muy formal, quiero decir más, fue escrito sin emoción, simplemente no fue escrito como ella escribe, conozco a mi mejor amiga, sé cómo escribe y enseguida cuando lo leí dije, ¿que es esto?, esta no es ella”, dijo Sanna Rameau, amiga de Ana María.

El mismo día de su desaparición, las cámaras de seguridad de edificio en el que residía en el barrio de Salamanca de Madrid fueron desactivadas con spray.

La cerradura del apartamento de Ana María no fue forzada y los servicios de emergencia encontraron el apartamento vacío y sin ningún desorden apreciable.

Su teléfono celular no fue localizado en un registro del local.

En las primeras etapas de la investigación, el caso fue trasladado a un juzgado que conoce de casos de violencia de género.

Desde el primer momento, la familia de Ana María desconfió de las respuestas dadas por Knezevich.

Al principio, no contestó el teléfono y luego negó saber algo sobre su paradero, afirmando que se encontraba en Serbia en el momento de su desaparición.

Su cooperación con las autoridades siempre fue limitada y contrató los servicios de un abogado penalista en Estados Unidos, tan pronto como comenzó la investigación.

Los registros carcelarios muestran que Knezevich, de 36 años, fue arrestado por el FBI, acusado de secuestro, y comparecerá ante una corte federal.