Una filtración de documentos reveló que GAESA, el poderoso conglomerado empresarial controlado por los militares cubanos, tiene reservas que superan los 18.000 millones de dólares, distribuidos entre cuentas bancarias, inversiones y activos inmobiliarios, mientras la mayoría de la población enfrenta una profunda crisis económica. Parte de estas riquezas están bajo la administración de empresas como Gaviota, vinculada al turismo, que concentra más de 4.200 millones de dólares, cifra que contrasta con los 339 millones que el régimen asegura necesitar para cubrir las necesidades médicas básicas del país. Esta opacidad financiera, sumada al férreo control militar sobre sectores clave como el turismo, el comercio y las remesas, refuerza el poder político y económico de la cúpula castrista, mientras el pueblo cubano sufre escasez, inflación y deterioro de los servicios esenciales.