Fuentes del sector de telecomunicaciones en un país vecino informaron a este diario que el incremento de llamadas internacionales podría estar relacionado con el interés de millones de ciudadanos venezolanos en el extranjero por conocer la situación de sus familiares en Venezuela. Esto ocurre en un contexto marcado por la controvertida posesión de Nicolás Maduro como presidente y la promesa de Edmundo González de asumir el cargo como jefe de Estado.
Martha, residente del populoso barrio de Petare en el noreste de Caracas, relató que ha mantenido “comunicación constante” con su hija, quien vive en Chile. Sin embargo, le advirtió mediante un mensaje en Telegram que evitaran hablar de política durante las llamadas para proteger su seguridad.
“Acá se dice de todo. Se rumorea que el gobierno tiene intervenidas todas las líneas telefónicas y que ocurre algo como en una película: si mencionas el nombre de Maduro, el sistema geolocaliza la línea y pone en la mira al propietario del teléfono”, señaló Martha en conversación con este diario, a través del servicio Signal.
Estas preocupaciones no son infundadas. En junio de 2022, este diario informó sobre las técnicas gubernamentales empleadas para vigilar a los venezolanos, reveladas por expertos en ciberseguridad. La información fue corroborada por Telefónica, empresa matriz de Movistar Venezuela, que reconoció la existencia de estas prácticas de monitoreo.
La situación subraya la tensa relación entre los ciudadanos venezolanos y el gobierno, así como las medidas de precaución que muchas familias adoptan para mantenerse en contacto sin comprometer su seguridad.