Para muchas madres venezolanas, el Día de las Madres se ha convertido en una fecha agridulce. Si bien la alegría de saber que sus hijos están a salvo y luchando por un mejor futuro las llena de orgullo, la ausencia física de sus seres queridos pesa profundamente.
Manteniendo la conexión a pesar de la distancia
A pesar de la distancia, las madres venezolanas y sus hijos migrantes han encontrado diversas formas de mantener viva la conexión durante este día especial, una de ellas han sido las videollamadas, que se convertido en una herramienta indispensable para que las madres y sus hijos puedan verse, escucharse y compartir momentos especiales, incluso a la distancia.
Envío de regalos, algunas familias optan por enviar regalos a sus madres en Venezuela, como una forma de demostrarles que las tienen presentes.
Otra de las realidades son las reuniones familiares virtuales, en algunos casos, se organizan reuniones familiares virtuales donde todos los miembros de la familia pueden participar, sin importar dónde se encuentren.
El amor de madre trasciende las fronteras
A pesar de las dificultades y la distancia, el amor de madre es un sentimiento inquebrantable que perdura en el tiempo. Las madres venezolanas y sus hijos migrantes encuentran consuelo en la certeza de que, a pesar de la separación física, el vínculo que los une es indestructible.
El Día de las Madres a distancia es un recordatorio de la resiliencia del pueblo venezolano y de la fuerza del amor que une a las familias. Es un día para celebrar la valentía de las madres que han sacrificado tanto por sus hijos, y para honrar la esperanza de un futuro donde el reencuentro sea posible.
FUENTE: www.lapatilla.com