Una juez federala de Miami dictaminó que las compañías de cruceros Carnival, Norwegian, Royal Caribbean y MSC Cruises participaron en lo que llamó “turismo prohibido y actividades de tráfico”, al transportar pasajeros a Cuba y beneficiarse del uso de las instalaciones portuarias de La Habana, confiscadas por el régimen de Fidel Castro.
“Al utilizar la Terminal y uno de sus muelles de diversas maneras, Carnival, MSC, Royal Caribbean y Norwegian cometieron actos de tráfico”, concluyó la jueza federal de distrito Beth Bloom, en una decisión que podría influir en juicios similares relacionados con posibles violaciones del embargo estadounidense a la isla.
Según registros judiciales, las empresas obtuvieron al menos 1,100 millones de dólares en ingresos y pagaron 138 millones de dólares a entidades gubernamentales cubanas.
Los cruceros a Cuba, dijo la magistrada, “constituían actividades turísticas y no actividades adecuadas de persona a persona, pagando millones de dólares al gobierno cubano para realizar viajes inadmisibles”.
El caso ahora irá a un juicio con jurado en mayo, donde se decidirá cuánto deberán pagar las líneas de cruceros.
La jueza falló a favor de Havana Docks, una empresa que tenía una concesión para operar el puerto de La Habana y que presentó demandas contra las cuatro compañías de cruceros por el uso que hicieron de esas instalaciones entre 2015 y 2019, cuando se autorizaron los viajes durante el deshielo de Obama.
Además, las cuatro empresas contrataron agencias gubernamentales cubanas para brindar servicios como excursiones a playas, clubes nocturnos y recorridos turísticos que, según la jueza, eran actividades turísticas clásicas.
Las compañías de cruceros argumentaron que sus recorridos eran “educativos” y promovían intercambios “de persona a persona”.
FUENTE: Redacción de www.americateve.com