Una gran tensión se vivió en Paiporta, Valencia, durante la visita del rey Felipe VI, la reina Letizia, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quienes acudieron al municipio afectado por las graves inundaciones que dejaron decenas de fallecidos y miles de damnificados.
En medio de gritos de “¡Fuera, fuera!” y “¡Asesino!”, la multitud lanzó barro y objetos hacia los representantes, en protesta por la gestión de la crisis.
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La visita oficial, que se realizó cinco días después del desastre, se encontró con una población profundamente afectada y descontenta.
Algunos residentes, visiblemente alterados, gritaban que se habían sentido abandonados, exigiendo respuestas mientras las fuerzas de seguridad, incluidos policías a caballo, intentaban controlar a la multitud.
Los agentes incluso tuvieron que desplegar paraguas para proteger a los monarcas y a la comitiva de los proyectiles lanzados por los manifestantes.
Según reportó la cadena española RTVE, Pedro Sánchez fue evacuado rápidamente ante el aumento de la tensión. El contingente recorrió las calles de Paiporta, aún cubiertas de barro y escombros, donde Felipe VI y Letizia intentaron dialogar con los vecinos.
En medio de la caótica situación, el rey mantuvo la calma y realizó varios intentos de conversar con los residentes. En un momento conmovedor, una persona rompió a llorar en su hombro y el monarca estrechó la mano de un hombre, tratando de escuchar sus quejas y preocupaciones.
Los habitantes, muchos de los cuales continúan sin agua potable, se quejan de la lenta respuesta de las autoridades. “No tenemos agua”, le manifestó una mujer a la reina Letizia, quien tenía manchas de barro en sus brazos debido al contacto con los residentes. El municipio de Paiporta, con 30.000 habitantes, sigue sumido en el lodo y los restos de vehículos y hogares arrasados por el desastre.
La tragedia, que ya ha cobrado más de 200 vidas, ha generado una gran indignación en la población, especialmente por lo que consideran una falta de preparación y respuesta eficaz de las autoridades. Los residentes cuestionan la demora en las alertas, que llegaron con un retraso de dos horas, y reclaman que gran parte de la limpieza y recuperación la están realizando ellos mismos junto con voluntarios.
Durante la visita, se escucharon demandas directas hacia el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y Pedro Sánchez. “¿Dónde está Pedro Sánchez?” y “¡Hemos perdido todo!” eran gritos constantes entre la multitud que buscaba respuestas y apoyo.
Después de aproximadamente media hora de confrontación, los Reyes se retiraron del lugar en sus vehículos oficiales, escoltados por la policía montada. Al retirarse, algunos manifestantes golpearon los coches oficiales, expresando su frustración de una manera inusual y sin precedentes para una monarquía que, en general, se esfuerza por mantener una imagen de cercanía con la ciudadanía.