Recientemente, han circulado rumores en redes sociales que afirman que Elon Musk, CEO de Tesla, habría invertido 40 millones de dólares en cinco anuncios durante el Super Bowl LIX para denunciar el despilfarro de fondos públicos en Estados Unidos. Estos comerciales estarían relacionados con el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), una entidad fundada por el expresidente Donald Trump con el objetivo de reducir el gasto federal. Sin embargo, hasta el momento, Musk no ha confirmado ni desmentido estas especulaciones.
El Super Bowl es conocido por sus elevados costos publicitarios. En 2025, el precio de un anuncio de 30 segundos alcanzó un récord de 8 millones de dólares, superando los 7 millones del año anterior. Esta cifra ha llevado a la participación de nuevas marcas y a la retirada de otras, como Google y Microsoft. La expectativa en torno al evento no solo se centra en el enfrentamiento deportivo entre los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles, sino también en la posible aparición de los mencionados anuncios de Musk.
El Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), creado por Donald Trump, afirma haber eliminado contratos innecesarios y generado ahorros superiores a los mil millones de dólares desde su fundación. No obstante, ha estado envuelto en polémicas, especialmente en relación con el acceso a información confidencial. Críticos señalan que Musk podría enfrentar un conflicto de intereses, dado que varias de sus empresas, como SpaceX, reciben importantes contratos gubernamentales. Además, existen preocupaciones sobre el posible uso indebido de información confidencial relacionada con los competidores de Musk.
Por ahora, la única manera de confirmar la veracidad de estos rumores es sintonizar el Super Bowl LIX el 9 de febrero y estar atentos a los anuncios que se emitan durante el evento.