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SUSCRIBITELa fiscal general de Nueva York se enfrenta a acusaciones muy graves derivadas de la compra de un inmueble en Virginia, y podría haber incurrido en delitos muy similares a los cargos por los que ella consiguió que el presidente fuera condenado hace algo más de un año
Washington / Nueva York – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió este jueves la "dimisión inmediata" de la fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, después de que se conociera que está siendo investigada por presunto fraude hipotecario.
La acusación podría representar un giro drástico en la carrera de James, quien logró una condena histórica contra Trump hace poco más de un año por cargos similares.
Letitia James, reconocida por su firme retórica de que “nadie está por encima de la ley”, se enfrenta ahora a señalamientos que podrían revertir su prestigio. Según una investigación en curso, James habría incurrido en fraude hipotecario y falsedad documental al adquirir una propiedad en Virginia en 2023, mientras ejercía como fiscal en Nueva York, donde es obligatorio residir legalmente para ocupar ese cargo.
Trump, quien recientemente regresó a la Casa Blanca, no tardó en reaccionar, calificando a James como una “política completamente corrupta” y una “sinvergüenza chiflada”. Desde su plataforma Truth Social, declaró: “Con alguien así en el cargo, es imposible luchar por Hacer América Grande de Nuevo (MAGA)”.
Las acusaciones surgieron a raíz de documentos presentados por Sam Antar, un empresario condenado por fraude que ahora se dedica a investigar delitos financieros. Según Antar, James habría declarado falsamente que planeaba ocupar una vivienda en Norfolk, Virginia, como su residencia principal, lo que le habría permitido acceder a condiciones hipotecarias más favorables. Sin embargo, al ser fiscal general de Nueva York, James debía residir en dicho estado para ejercer legalmente.
En los documentos figura que James otorgó un poder notarial a una familiar, Shamice Thompson-Hairston, para que gestionara la compra de la propiedad. La declaración jurada firmada por James expresa: “Tengo intención de ocupar esta propiedad como residencia principal”, lo que plantea dos escenarios jurídicamente delicados.
Si dicha afirmación fue hecha únicamente para obtener beneficios hipotecarios, podría tratarse de un caso de fraude hipotecario. Pero si realmente James tenía intención de mudarse a Virginia, entonces habría incurrido en una violación directa de la ley neoyorquina al no residir en el estado mientras ejercía su cargo, lo que podría llevar a su inhabilitación.
La compra del inmueble ocurrió en agosto de 2023, justo antes de que James presentara la demanda que derivó en una sentencia de 454 millones de dólares contra Trump y la prohibición de realizar negocios en Nueva York. Algunos expertos legales ya plantean que, de confirmarse las acusaciones, la validez del proceso contra el presidente podría verse afectada, e incluso abrir la puerta a su anulación.
Además, especialistas consultados advierten que, si se demuestra que James proporcionó información falsa de forma consciente en una transacción financiera, podría enfrentar cargos federales por fraude electrónico, con penas de hasta 30 años de prisión y multas de hasta un millón de dólares.
Solicitan investigación federal
William Pulte, director de la Agencia Federal de Financiación de la Vivienda (FHFA), envió una solicitud formal al Departamento de Justicia para que se investigue a James. En la carta, dirigida a la fiscal general Pam Bondi, Pulte acusa a James de falsear registros con el fin de obtener mejores condiciones en su préstamo hipotecario.
“El historial hipotecario de la Sra. James muestra que, pese a estar legalmente obligada a residir en Nueva York, declaró que ocuparía como residencia principal una vivienda en Virginia. Esa afirmación parece haberle permitido acceder a tasas de interés más bajas y condiciones más favorables”, escribió Pulte.
Además, el director de la FHFA también mencionó posibles irregularidades anteriores. En 2001, James adquirió una propiedad de cinco unidades en Brooklyn, pero supuestamente reportó sistemáticamente que el inmueble solo tenía cuatro, tanto en permisos de construcción como en solicitudes hipotecarias.
Un escándalo con repercusiones nacionales
La investigación todavía está en curso, pero ya ha provocado un terremoto político y judicial. En un momento clave para la administración Trump, el caso podría representar tanto una revancha personal como un golpe significativo al Partido Demócrata en uno de sus bastiones clave.
De confirmarse las acusaciones, Letitia James enfrentaría no solo consecuencias legales graves, sino también la posible ruina de su carrera política, marcada hasta ahora por su papel como principal opositora de Trump en los tribunales.
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