El nieto del fallecido dictador Fidel Castro mantiene este 5 de diciembre su lujosa fiesta de cumpleaños, esa que llamó la de “un joven revolucionario”, en su bar EFE en La Habana, pese al colapso de la red eléctrica que sufrió Cuba.
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SUSCRIBITESandro Castro muestra una vez más que, como toda su familia dictatorial, se siente por encima de crisis económicas, apagones y duras críticas en su contra por parte del cubano de a pie
El nieto del fallecido dictador Fidel Castro mantiene este 5 de diciembre su lujosa fiesta de cumpleaños, esa que llamó la de “un joven revolucionario”, en su bar EFE en La Habana, pese al colapso de la red eléctrica que sufrió Cuba.
Lo confirmó el organizador de este festejo en una directa en sus redes sociales, que luego fue retirada.
El lujoso cumpleaños del nieto más mediático y polémico de Fidel Castro, en lo que en una muestra de cinismo total el organizador del festejo, Carlos Rogelio Bolufé, llamara el bar más humilde de Cuba, se celebra en un país sufriendo largos apagones, pese a que las autoridades anunciaron el restablecimiento de la conexión del sistema eléctrico nacional un día después de su tercer colapso en menos de dos meses, que obligó a Sandro Castro a cerrar las puertas de su bar este 4 de diciembre y pareció poner en peligro su “humilde” fiesta.
Pero su organizador, Carlucho Verde, como se identifica en redes sociales, se encargó de decir en su directa que se mantenía por encima de todo y todos, mientras bebía ron Santiago 15 de una botella de unos 300 dólares, según él mismo mostró en su transmisión.
Para Jorge Luis García Pérez Antúnez, ex preso político y miembro de la plataforma Cuba Primero, es una ofensa que el nieto del difunto dictador Fidel Castro celebre una fiesta con entrada de mil pesos cubanos y consumo mínimo por mesa de otros 15 mil, cuando la familia que Sandro Castro representa ha destruido con su dictadura al país y tantos niños no tienen cómo celebrar su cumpleaños en la isla.
La celebración de cumpleaños de Sandro Castro, duramente criticada en redes sociales por muchos cubanos, ocurre también en momentos en que el régimen anunció que tras reconectar la red eléctrica nacional, seguirá imponiendo apagones de unas cinco horas cada día.
El régimen aún mantiene la suspensión de todas las actividades laborales y docentes que estableció tras el nuevo colapso eléctrico, aunque se han ido restableciendo paulatinamente las clases.
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