En medio de las preocupaciones por el aumento de la deuda pública, un importante déficit presupuestario y las polémicas reclamaciones territoriales de China en aguas próximas al país, la visita de Obama despierta también grandes esperanzas tanto para el gobierno — que quiere que se levante un embargo sobre la exportación de armas para poder responder mejor a Beijing — como para activistas de derechos sociales, que esperan que pida explicaciones al represivo partido único que, según apuntan, trataría a sus críticos con brutalidad.
La jornada electoral terminará más tarde el domingo, horas antes de la llegada de Obama al país, y los resultados de los comicios de los que saldrán los 500 miembros de la Asamblea Nacional se anunciarán en el plazo de 20 días. Pero la cita con las urnas es una mera formalidad: El Partido Comunista controla las elecciones y ya habría elegido quienes ocuparán los escaños y cuantos diputados ajenos a la formación habrá en la cámara, apuntó Human Rights Watch.