Menos de un tercio de los legisladores respondieron a un sondeo en todo el estado sobre si preferirían enmendar la ley o dejarla como está cuando comience su sesión el lunes. Algunos citaron una inminente reunión de rotarios o sus preparativos para presentarse al Congreso como motivos por los que no tenían tiempo de responder, mientras que otros simplemente colgaron el teléfono a periodistas a mitad de las preguntas.
La encuesta, realizada por reporteros de siete periódicos y Associated Press desde el 13 de abril, consistía en tres preguntas planteadas a los 168 senadores y representantes del estado. La primera pregunta, que pedía una respuesta de sí o no, era: "¿Apoya usted revisar la Ley 2 de la Cámara para quizá enmendarla durante la sesión regular?". La segunda preguntaba qué partes querrían modificar y la tercera pedía cualquier otro comentario al respecto.
El representante republicano William Brawley, que votó a favor de la ley, expresó de la siguiente manera su opinión sobre el sondeo: "Leímos su cuestionario y creemos que es una trampa y no responderemos".
En total, 41 legisladores —la mayoría demócratas— se mostraron a favor de revisar la ley. La cifra es mayor que el grupo —también demócratas en su mayoría— que votó en contra del texto o abandonó la cámara en protesta el día que se aprobó durante una sesión especial en marzo.
La ley indica que en los edificios del gobierno, así como en escuelas públicas y universidades, las personas transgénero deben utilizar los baños que correspondan con el género de su certificado de nacimiento. También excluye la orientación sexual y la identidad de género de los aspectos protegidos contra la discriminación en el estado y revoca las ordenanzas municipales que prohíban esa discriminación.
El texto ha recibido críticas generalizadas de activistas a favor de la igualdad, líderes empresariales e incluso iconos del rock como Bruce Springsteen, que canceló un concierto en el estado.
Once de los encuestados dijeron que no estaban a favor de cambiar la ley. Otros 17 declinaron hacer comentarios o bien ofrecieron una respuesta ambigua. El resto simplemente no contestó sus teléfonos ni devolvió mensajes o correos electrónicos.
Varios intentaron cortar la llamada con rapidez.
El representante John M. Blust, al que se localizó por teléfono en su casa, respondió a la primera pregunta diciendo. "Ahora mismo no estoy pensando en eso".
"¿Puedo anotarlo como 'no'?", preguntó el periodista.
El republicano, que votó a favor de la ley, dijo que no tenía más tiempo para hablar porque tenía mucho trabajo de su campaña para un puesto en el Congreso estadounidense en representación del distrito 13 de North Carolina.
El republicano Josh Dobson, que también votó a favor de la propuesta, dijo: "Por lo general desvío todo a la oficina del Presidente (de la cámara)" y después colgó el teléfono antes de que el periodista pudiera hacer otra pregunta.
La representante Pat Hurley explicó con amabilidad que se estaba preparando para una reunión de rotarios y pidió al periodista que volviera a llamar en torno a las 2 de la tarde. No respondió a la segunda llamada.
De los 41 legisladores de la lista asignados a AP, un puñado respondió con rapidez. Otros 28 nunca respondieron a llamadas y correos electrónicos a sus oficinas legislativas, que se vieron seguidos por mensajes en sus domicilios, celulares o teléfonos de trabajo.
El senador demócrata Floyd McKissick, de Durham, que quiere revocar la ley y abandonó la sala como protesta cuando se aprobó, sugirió que algunos podrían estar poco dispuestos a hablar por vergüenza o lealtad a la asamblea republicana.
"He hablado con dos que no estaban contentos con la ley desde el principio, pero la presión de la asamblea para que se mantengan unidos es muy fuerte", dijo. "Pero ninguno de ellos hablaría en público contra su asamblea".
Un legislador que no temía hablar sobre su apoyo a la propuesta es el senador Jerry Tillman, que habló con una franqueza afinada por siete legislaturas en la cámara.
"No estaría a favor de enmendarla", dijo por teléfono. "Aprobamos una buena ley, y estoy dispuesto a defender esa ley".
"Ahora mismo no creo que el ánimo sea de hacer ningún cambio", añadió.
Horas más tarde, el líder del Senado estatal, Phil Berger, se hizo eco de ese parecer.
Aunque Berger no respondió al sondeo, el miércoles comentó con periodistas la posibilidad de hacer cambios en la legislación. "No creo que en ningún punto yo estuviera dispuesto a decir que vamos a hacer cualquier cambio. Simplemente no veo la necesidad".
FUENTE: Associated Press