En la región oriental de Turingia se registraron 13 viviendas de cinco regiones, en una pesquisa sobre un ciudadano ruso de 28 años con raíces chechenas sospechoso de intentar unirse a los combates en Siria en el bando del grupo Estado Islámico, señaló la policía. El caso derivó más tarde en una investigación sobre otras 13 personas sospechosas de financiar actividades extremistas.
Todos los sospechosos eran de origen checheno y ciudadanía rusa y habían solicitado asilo en Alemania, indicó la policía. Sus solicitudes no se habían resuelto todavía.
El grupo no planteaba ningún riesgo concreto de ataque inminente, según el comunicado policial, que no aclaró si se habían producido detenciones.