El alcalde de Roma sancionó una ordenanza el mes pasado para la protección de Trevi y otras 40 fuentes históricas. La ordenanza fija fuertes multas por treparse a un monumento, sentarse o comer sobre él.
Varios ex agentes de policía empezaron a alejar a los turistas del borde de piedra de la Fuente de Trevi el martes. Les avisaron que no debían comer ahí y que debían dejar abierto un camino para la circulación de la gente.
Meses atrás, un hombre se arrojó desnudo a la Fuente de Trevi y fanáticos del fútbol dañaron una fuente barroca en la Plaza de España cerca de la célebre escalinata.
La municipalidad dijo que los agentes voluntarios montarán guardia de 9 de la mañana a medianoche hasta mediados de octubre. Una vez finalizada la temporada alta del turismo, las autoridades decidirán si las patrullas serán permanentes.