El zoológico de la capital mexicana y la agencia de vida silvestre detallaron el jueves que el gorila de 24 años, conocido como Bantú, aparentemente sufrió un ataque cardiaco mientras era sedado el miércoles por la noche. Los médicos pasaron 30 minutos intentando revivirlo.
Bantú iba a ser trasladado al Zoológico de Guadalajara, en el oeste de México, con la esperanza de que se apareara con dos hembras.
Las autoridades señalaron que la causa de muerte precisa se establecerá luego que se practiquen más estudios. Bantú pasó toda su vida en el Zoológico de Chapultepec.
La muerte del ejemplar ocurre tras la indignación internacional en torno al gorila Harambe que tuvo que ser sacrificado el 28 de mayo en el Zoológico de Cincinnati, cuando un niño calló en su recinto.