La asesora, Kellyanne Conway, fue interrogada en un programa televisivo sobre los comentarios del secretario de prensa de Trump, Sean Spicer, de que la multitud que asistió a la toma de posesión de Trump fue la más grande de la historia, pese a las fotos y videos que demostraban que no era así. Conway respondió que no se trataba de ser inverosímil sino de ofrecer "una verdad alterna".
El término "alternative facts" inmediatamente arrancó como hashtag en Twitter, donde comenzaron a llover las burlas.
"Los cigarrillos son buenos para la salud", bromeó un comentarista, mientras otro se mofaba: "No vayan a creer que es lunes, estamos todavía en el fin de semana".
Pero a pesar del tono jocoso de la tertulia cibernética, otros señalaban sombríamente las similitudes con la trama del famoso libro de George Orwell "1984", en que un régimen totalitario trata de convencer a la población de que lo cierto es falso y lo falso es cierto.