La ciudad está ubicada a lo largo de la única línea de abastecimiento del Estado Islámico, entre la frontera turca y Raqqa, que los extremistas llaman su capital. Si Manbij es tomada, será la derrota más grande del EI en Siria desde julio del 2015, cuando perdió la ciudad fronteriza de Tal Abyad.
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que la batalla se está llevando a cabo en el suroeste de Manbij entre combatientes del EI y las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), estas últimas respaldadas por Estados Unidos.
Rami Abdurrahman, director del Observatorio —que obtiene su información de una red de activistas en Siria_, dijo que las FDS tomaron dos plazas en la zona occidental de la ciudad y luego avanzaron hacia otra plaza, respaldados con apoyo aéreo de la coalición encabezada por Estados Unidos.
Nasser Haj Mansour, asesor de las FDS, dijo que los soldados entraron a la ciudad el miércoles por el norte, cerca de depósitos de granos, y sostuvieron enfrentamientos con extremistas del EI. Confirmó que otros combatientes entraron a Manbij por el oeste.
El periodista Mustafa Bali, que acompañó a tropas de las FDS el miércoles, dijo que solo era cuestión de tiempo antes que los depósitos de granos fueran tomados. Lo que los separa de la ciudad es una carretera importante, agregó, y calculó que las Fuerzas están a unos tres kilómetros (casi dos millas) del centro de la ciudad y a solo dos kilómetros (una milla) del principal hospital.
"Hay choques intensos en todos los flancos de la ciudad", dijo Bali.
Abdurrahman dijo que el EI todavía controla los depósitos de granos.
Los combatientes de la Coalición Árabe Siria, que forma parte de las Fuerzas Democráticas, "han consolidado su posición alrededor de Manbij de cara a la siguiente fase de las operaciones", indicó el jueves el Comando Central de Estados Unidos en un comunicado.
Estados Unidos ha colocado 300 soldados de sus Fuerzas Especiales dentro de las FDS. Francia también ha confirmado que está dando entrenamiento a dichas Fuerzas Democráticas.
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El reportero de la AP Philip Issa contribuyó a este despacho desde Beirut.
FUENTE: Associated Press