La secretaria de Comercio de Estados Unidos, Penny Pritzker, recordó este martes que "un mayor comercio con Cuba va a depender no solo de los deseos de compañías estadounidenses, que tienen altas expectativas al respecto, sino también de que el Gobierno cubano haga cambios".
Así se expresó en una entrevista en el canal televisivo CNBC, tras su vistia a la Isla la semana pasada. Los cambios no solo deben afectar a empresas estadounidenses, "sino también a compañías de todo el mundo", precisó.
"El Gobierno cubano está muy interesado en que compañías extranjeras inviertan unos 2.500 millones de dólares anuales en su economía, pero actualmente hay algunos retos que están bloqueando mayores inversiones y comercio, y claro, no olvidemos que hay un embargo vigente", aseguró Pritzker. También se refirió al problema de la doble moneda.
"Además, si se quiere contratar a alguien hay que hacerlo por medio de una agencia de empleos controlada por el Estado, así que usted no tiene libertad para entrevistar a quien quiera; y también hay incertidumbre con respecto a las regulaciones. Así que hay muchas cosas que son impedimentos a la inversión extranjera directa en Cuba", añadió Pritzker.
La secretaria de Estado agregó que "es un proceso" y consideró que los gobernantes de la Isla "son cautelosos y conservadores mientras intentan hacer que su economía funcione".