El ejercicio fue dispuesto por el Ministerio de Educación luego de que el 16 de abril se registrara en el país un poderoso terremoto de 7,8 grados de magnitud que impactó en la costa central y dejó 663 muertos y miles de personas sin hogar.
El ejercicio de evacuación se realizó al mediodía en jardines de infantes, escuelas primarias y secundarias de todo el país de las que los estudiantes salían en fila de a uno, con las manos o mochilas sobre las cabezas hasta llegar a los patios de los establecimientos.
Tras el terremoto de abril se han producido al menos cuatro fuertes réplicas superiores a seis grados de magnitud, dos de ellas el 18 de mayo, lo que obligó el desalojo de edificios altos y unidades educativas.