Una corte penal en Riad impuso las sentencias a las 32 personas acusadas en febrero. Entre ellas hay 30 saudíes, un iraní y un afgano. Sus nombres no se hicieron públicos y no estaba claro si alguien les había representado ante el tribunal.
Teherán no respondió de inmediato a los veredictos, en un caso del que había pocos detalles.
Los reos estaban acusados de establecer una red de espionaje en colaboración con la inteligencia iraní y de proporcionar información muy sensible sobre el Ejército saudí a Irán, según medios estatales saudíes.
También se les acusaba de conspirar para cometer sabotajes contra intereses económicos saudíes, incitar a la discordia religiosa, reclutar a otros para espionaje y participar en protestas contra el gobierno.
Arabia Saudí cortó sus relaciones diplomáticas con Irán después de que grupos de manifestantes asaltaran y saquearan dos delegaciones diplomáticas saudíes en la república islámica.
Esas manifestaciones violentas siguieron a la ejecución en Arabia Saudí de un destacado clérigo chií el pasado enero, junto con otras 46 personas.
La tensión se ha mantenido alta durante todo el año entre Irán, la principal potencia chií, y el reino de Arabia Saudí, gobernada por saudíes. El portavoz del Ministerio iraní de Exteriores dijo el lunes que Teherán y Riad pueden y deben cooperar para resolver las crisis regionales.
Bahram Ghasemi dijo a la prensa que los recientes acuerdos de la OPEP para reducir la producción de petróleo y las elecciones presidenciales en Líbano, donde un aliado de Irán que fue elegido presidente designó a un representante afín a Arabia Saudí como primer ministro, son ejemplos recientes de cooperación entre los dos países.
FUENTE: Associated Press