Merkel dijo a la prensa el martes: "naturalmente tenemos la esperanza, aun con dificultades temporarias, de que las cosas se desarrollen de manera positiva".
Sin embargo, la canciller se negó a responder a la pregunta de si estaría a dispuesta a pasar por encima del reclamo del gobierno estadounidense de un arreglo en su investigación de las ventas por el banco de valores respaldados por hipotecas.
Las acciones de Deutsche Bank cayeron 2,3% a 10,31 euros el martes y han caído 55% en lo que va del año debido a las bajas ganancias y problemas legales como la investigación estadounidense. Los inversionistas sufrieron pérdidas enormes con valores respaldados por hipotecas en 2007-2008, lo cual fue uno de los factores que provocaron la crisis financiera global.
Deutsche Bank dice que no ha pedido ayuda para tratar con las autoridades estadounidenses. Dice que espera pagar menos de 14.000 millones de dólares después de las negociaciones. Adicionalmente, asegura que no le ha pedido ayuda financiera al gobierno.
En todo caso, un rescate por parte del gobierno podría violar nuevas normas de la UE diseñadas para proteger a los contribuyentes de los bancos con problemas y para obligar a los accionistas y tenedores de valores a aceptar pérdidas antes de obligar a los contribuyentes a pagar. Además, 2017 es año electoral en Alemania.