Cifras de aduanas difundidas el miércoles mostraron que las ventas externas se contrajeron 6,8% en comparación con hace un año y alcanzaron 6,46 billones de yenes (59.200 millones de dólares) mientras que las importaciones se desplomaron 14,9% y terminaron en 5,7 billones de yenes (52.200 millones de dólares).
El saldo comercial resultante de 754.000 millones de yenes (6.900 millones de dólares) fue el más alto desde octubre de 2010.
Las importaciones de carbón, petróleo, alimentos y maquinaria bajaron ese mes. El saldo se hizo más contrastante debido a un aumento del valor del yen a 109 unidades por dólar estadounidense. Si el yen sube frente al dólar se abaratan las importaciones en moneda nacional.
Japón ha aumentado sus compras de alimentos a China, que cuestan menos, al tiempo que ha reducido las de soja, carnes y granos producidos en Estados Unidos.
Los envíos de vehículos a Estados Unidos, que representan el 40% de sus exportaciones hacia ese país, aumentaron 6,4%.
En términos de valor, se contrajeron las exportaciones japonesas a todo el mundo de maquinaria, maquinaria eléctrica y sustancias químicas.
Los envíos de Japón a China bajaron en marzo 7%, debido principalmente a una disminución de las exportaciones de maquinaria eléctrica y sustancias químicas a ese país.
La desaceleración del crecimiento en China también afectó otros mercados asiáticos, con la consecuente baja de las exportaciones de Japón a otros países de la región.
La mejora reciente del panorama global quizá propicie un aumento de las exportaciones en los próximos meses, dicen los economistas.
Sin embargo, el fortalecimiento del yen reduce las ganancias en dólares repatriadas. Esta situación no es alentadora para las compañías que en los últimos años se han beneficiado de un debilitamiento del yen frente al dólar.
"De momento, sin embargo, la caída en el valor de las exportaciones ha reducido los ingresos de las empresas y podría socavar su disposición de ampliar su capacidad y subir los sueldos", dijo en un comentario Marcel Thieliahnt, de la firma Capital Economics.
FUENTE: Associated Press