El grupo extremista controla la ciudad en el norte de Siria desde 2013 y la considera la capital de su autoproclamado califato. Los bombardeos sobre la zona se han incrementado recientemente. Una fuerza de liderazgo curdo respaldada por Estados Unidos y Rusia ha dicho que planea liberar la ciudad en los próximos meses.
La alianza, conocida como las Fuerzas Democráticas Sirias, ha tenido éxito en combates contra el grupo EI en el norte de Siria y el mes pasado expulsó a los milicianos islamistas de la localidad de Shaddadeh, su bastión en Hassakeh.
El domingo continuaban los intensos bombardeos sobre Raqa. El Observatorio Sirio para los Derechos humanos, con sede en Gran Bretaña y que monitorea el conflicto a través de una red de activistas sobre el terreno, indicó que en las últimas 24 horas han muerto 55 personas, incluidos 13 niños y una mujer embarazada, en una serie de bombardeos rusos contra zonas residenciales.
El grupo activista Raqa Está Siendo Masacrada en Silencio, contrario al grupo Estado Islámico, también atribuyó los bombardeos a aviones rusos y estimó la cifra de víctimas en 60 personas.
La agencia de noticias Aamaq, afiliada al grupo EI, dijo que 43 personas habían muerto y 60 resultaron heridas. La agencia difundió un video presentado como la "masacre cometida por aviación rusa contra una de las calles más transitadas de Raqa". Las imágenes muestran lo que parecen ser bebés muertos y edificios bombardeados, automóviles en llamas y otras escenas de destrucción.
Los grupos activistas dijeron el sábado que los ataques aéreos se habían producido cerca del hospital nacional, una antigua base militar y otros barrios.
Rusia realiza ataques aéreos en Siria desde el 30 de septiembre. Moscú empezó a reducir su presencia militar en Siria en la última semana, después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenara una retirada parcial de aeronaves y tropas como apoyo a las conversaciones indirectas de paz en Ginebra.
Putin dijo el jueves que Moscú mantendrá tropas suficientes en Siria como para continuar la lucha contra el grupo EI, la filial siria de Al Qaeda Frente Nusra y otras organizaciones extremistas.
El grupo EI no está incluido en el alto el fuego mediado por Rusia y Estados Unidos, que entró en vigor el 27 de febrero y produjo un descenso en la violencia en Siria.
Los bombardeos en Raqa se producían después de que el grupo EI perdiera amplias extensiones de territorio en el norte de Siria, incluidas zonas de la provincia de Raqa, en batallas contra las Fuerzas Democráticas Sirias.
En el sur, tropas sirias han lanzado una ofensiva en un intento de capturar la antigua localidad de Palmira, tomada por el grupo extremista desde mayo.
Activistas de oposición informaron de intensos bombardeos el domingo en la ciudad, donde se encuentran algunos de los restos arqueológicos más preciosos del mundo. Los extremistas han dañado o destruido varios de esos monumentos.
Más de 250.000 personas han muerto y la mitad de la población del país se ha visto desplazada por los cinco años de guerra civil en Siria.
FUENTE: Associated Press