El acusado, que no fue identificado por su nombre, confesó en la corte que asaltó a las mujeres en agosto y noviembre del año pasado. El análisis de ADN lo vinculó con los dos delitos.
El hombre de 32 años solicitó asilo en Alemania a donde arribó hace más de un año con su esposa e hijos.
Las víctimas, que tenían 21 y 27 años en ese momento, estudiaban la universidad en Bochum.
El caso tuvo gran repercusión y alentó el debate nacional en el país acerca del aumento de delitos violentos cometidos por migrantes.