En declaraciones en la apertura del Parlamento, Ghani dijo que las fuerzas afganas habían expulsado a las personas leales al grupo EI de regiones en la provincia de Nangarhar, en la frontera con Pakistán.
Afganistán, afirmó, será un "cementerio" para el grupo EI.
La milicia extremista tiene presencia en Afganistán desde hace más de un año. Las autoridades han señalado que muchos milicianos que se describen como miembros del grupo EI son combatientes talibanes descontentos.
Las tropas afganas anunciaron la victoria tras una operación de 21 días en los distritos de Achin y Shinwar, en Nangarhar, y se atribuyeron la muerte de al menos 200 milicianos.